17 agosto, 2006

Cuando en la tarde aparezco en los espejos

Cuando en la tarde aparezco en los espejos
Cuando yo y la tarde queríamos unirnos
Tristemente nos despedimos
Tristemente nos hablamos en el espejo que disuelve las imágenes
Quién soy entonces
Quizás por un momento
De verdad soy yo que me encuentro

Quién soy yo sino nadie
Alguien que quisiera pasarse los días y los días
Como un solo domingo
Mirando los últimos reflejos del sol en los vidrios
Mirando a un anciano que da de comer a las palomas
Y a los evangélicos que predican el fin del mundo

Cuando en la tarde no soy nadie
Entonces las cosas me reconocen
Soy de nuevo pequeño
Soy quien debiera ser
Y la niebla borra la cara de los relojes en los campanarios.

Jorge Teillier

12 comentarios:

Lycette Scott dijo...

Que bello

Nidesca dijo...

esas conversaciones con los espejos se las traen.

la eterna pregunta: ¿quién soy? y es que nos reinventamos a cada instante, y es que nunca terminamos de conocernos a fondo.

bello poema.

abrazos

fgiucich dijo...

Un poema melancòlico como la caìda de la tarde. Abrazos.

Rodolfo N dijo...

Que hermosa frase y que sintetizadora.Hermoso
Besos

Angélica dijo...

Cuando la lluvia de la gris tarde me obliga a mirarme en mi propio espejo, mi alma se entrelaza con los enredos de mi propia imagen y caigo a la deriva de un querer escapar... un escapar imposible e invisible... sigo aqui...

Gracias por este bello escrito.

Lety Ricardez dijo...

Los espejos, todavía no desaparece para mí su magia, la fascinación que me produce el introducirme o desaparecer en ellos, todavía me sucede que abran la puerta a dimensiones extrañas

Saludos cariñosos para tí Ana Isabel

@Intimä dijo...

Que bonita poesía,
reconocerse ante el espejo o
perderse en quien no se reconoce?
Ays dificil dilema
Besitos.

el mono azul dijo...

Y cuando en mi habitación cae la tarde y la luz se consume, mi espejo se apaga.

EBE dijo...

Hermoso...que otra cosa se puede leer por aquí?
Besos mi niña de alas de mariposa

Joselu dijo...

Interesante poema del poeta chileno que representa la voz del sentimiento humano frente a los experimentos de la vanguardia. Somos misteriosos, nos desconocemos a nosotros mismos, los espejos nos devuelven ese misterio. Un cordial saludo.

@Intimä dijo...

Preciosa poesía
Besitos

Andrés Asenjo Morosetti dijo...

Muy cierto y muy valido es el preguntarse quien soy yo?. No como la pregunta que se hace una vez, sino como aquella que reflexiona sobre nuestra existencia y nos brinda la posibilidad de acordarnos siempre de como cambiamos y para donde vamos.
Me gusto esa duda que planteas.