Señora, amor es violento,
y cuando nos transfigura
nos enciende el pensamiento
la locura.
No pidas paz a mis brazos
que a los tuyos tienen presos:
son de guerra mis abrazos
y son de incendio mis besos;
y sería vano intento
el tornar mi mente oscura
si me enciende el pensamiento
la locura.
Clara esta la mente mía
de llamas de amor, señora,
como la tienda del día
o el palacio de la aurora.
Y al perfume de tu ungüento
te persigue mi ventura,
y me enciende el pensamiento
la locura.
Mi gozo tu paladar
rico panal conceptua
como en el santo Cantar:
Mel et lac sub lingui tua.
La delicia de tu aliento
en tu fino vaso apura,
y me enciende el pensamiento
la locura.
Rubén Darío
Si revisan el hitorial de este blog encontrarán la publicación de este poema dos veces, está que les presento hoy y una hace unos seis meses.. la publicación del mismo por segunda vez se debe a que ha estado rondando mi mente durante días, estos mismos en los que no he publicado nada.. tal vez por que la primera vez que lo leí,o me lo leyeron acredito mi gusto por el mismo..desde ese día el Cantar de los Cantares y Ruben Darío se ganaron mi admiración y para que alguien o algo obtenga mi admiración tiene que ser una persona o cosa de mucho calibre, en todos los sentidos...(suena un poco exigente pero soy así)
3 comentarios:
Delicioso leerlo... las veces que sea.
Un beso mariposa
Un poema apasionado, bien al estilo de Darío. Abrazos.
QUE GRANDE... a mi alguien me escribe algo así y me puede mínimo dejar a sus pies
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